En la Colonia Santa María en el temible crucero de la muerte de la calle Fresno y calle Madereros los accidentes viales son cosas de todos los días.

 




En la Colonia Santa María  en el temible crucero de la muerte de la calle Fresno y calle Madereros los accidentes viales son cosas de todos los días.

 Desde que se fundó  el barrio,  la entrada principal siempre fue la calle de Fresno, la afluencia vehicular  por lo regular es intensa, mas sin embargo  desde que se pavimento el barrio los accidentes se volvieron muy frecuentes por martirios motivos, el principal la falta de señalamiento, la indiferencia de la autoridad vial así como un Taller auto eléctrico Ibarra principal causante de los  “choques.

 Han pasado  cualquier cantidad de directores  todos ellos  no les brincan las neuronas,  la indiferencia ha sido la característica principal, la apatía por solucionar este conflicto vial  del Departamento de Ingeniería Vial  no le fluyen ideas, un desastre  y una constante los accidentes

Los vecinos del barrio se les ha manifestado a la DMSP que solucione el problema,  que la calle la hagan  solo de un sentido, pues aparte de angosta, algunos estacionan en ambos sentidos sus automotores, más aun en la noche es terrible pues hay un Gimnasio donde la afluencia vehicular es intensa y por consecuencia  circular por el lugar es un verdadero peligro, eso sería uno, otro son un estorbo para el vecindario y sus cocheras.

A los múltiples jerarcas viales, candidatos, funcionarios que no funcionan se les ha expuesto el  problema así como las soluciones alternas, pero pa’ no variar todo queda en un “lo vemos”, pero a la fecha no solucionan nada.

 Es terrible la indiferencia de la Dirección Municipal de Seguridad Pública, pues  siempre se ha manifestado este terrible problema, más aún ahora que con la construcción de los inservibles  Puentes Gemelos, la vía sigue siendo una de las más transitadas en el barrio, por consecuencia el peligro fatal es inminente y con consecuencias graves, más aún si le agregamos que en la esquina de Madereros y calle Fresno hay un Taller Auto-Eléctrico  Ibarra dónde llegan camiones traseros, camionetas, carros que reparan en las esquinas (reparar es un decir porque el propietario cobra y bien y deja todo a medio chiles), el tipo aparte de estorbar en la súper transitada rúa, estaciona sus vehículos donde se le antoja, por lo regular  en la sombrita pero no piensa que estorba los espacios que corresponden a los vecinos, lo conducente es que lo haga en enfrente de su casa o sus familiares.

En pocas palabras los choques y accidentes se manifiestan todos los días, tan solo ayer  un Taxi que traía prisa fue embestido por otro porque también le urgía llevar las tortillas,  todo esto porque no hay  ningún señalamiento.

 Hace algunos ayeres Don Pedrito Ávila Nevárez hizo el favor de poner unas boyas para intentar frenar el exceso de velocidad que la mayoría que transita por la estrecha calle, pero  duraron sólo algunas horas, los malandrines al ver de qué el material  era  metal, no tuvieron empacho en quitarlas y venderlo como fierro viejo, pero poner bordos no es la solución, también en alguna ocasión pusieron un par de láminas  de “Alto” en cada poste, señalando parada obligatoria, pero no faltaron los rufianes que se robaron las láminas para tenerlo como comal.

Por lo pronto aquí debe de actuar dos instancias que deben  poner orden al desorden de un Taller nocivo,  el primero en actuar debería ser la temible Dirección Municipal de Seguridad Pública que comanda el tristemente célebre Antonio Bracho, la otra debería intervenir el Juzgado Administrativo que comanda el hermano Mario Pozo Riestra que dicho sea de paso es una auténtica Lámpara sin luz, bueno ambos personajes son una lacra y son funcionarios que no funcionan, por lo pronto diría el ciego “ya veremos”

Publicar un comentario

0 Comentarios