El Superdelegado del Gobierno Federal en
Guanajuato descarta el imperio del nepotismo, amiguismo y edecanes, pero...
miente
Para
Mauricio Hernández Núñez, el nominado Superdelegado del Gobierno Federal en
Guanajuato, en la Secretaría del Bienestar en la entidad no hay ni corrupción,
ni despidos injustificados, tampoco hay nepotismo ni favores sexuales a pesar
de las decenas de denuncias en contra suya y de su ex empleado, Ricardo Gómez
Escalante, venido a candidato a una diputación federal.
En
ejercicio de su derecho de réplica y a través de llamada telefónica, el
representante de la Delegación de Bienestar en Guanajuato, Mauricio Hernández
Núñez rechazó que la oficina opere "como agencia de edecanes”, y manifestó
su inconformidad por el hecho de “pluralizar ya que solo una de las mujeres
contratadas por la Delegación” se había desempeñado como edecán anteriormente;
“nada de qué avergonzarse”, acotó.
“La
Señora Guadalupe Horta trabajó como edecán por muchos años, pero desde hace
poco más de un año trabaja con nosotros, actualmente se encuentra en el ISSSTE
en las brigadas de vacunación, solo es un caso, los demás no tienen sentido, no es verdad, no es real”,
insistió sobre la sensación de la Motofiesta 2018.
Según
la información obtenida por Códigos a través de la página de Gobierno Federal,
la servidora pública Guadalupe Horta, se desempeña como Enlace de Planeación
Táctica, Coordinación Interinstitucional Discapacidad, cuenta con estudios de
nivel secundaria y percibe un sueldo mensual de $15,592.00.
Sin
embargo, pese a las declaraciones del Delegado de Programas Sociales, Guadalupe
Horta no es la única Funcionaría federal que otrora se desempeñó como edecán.
Si
bien, esta información no fue mencionada en sus currículos presentados ante la
Delegación, la Coordinadora de Discapacidad Mónica Frausto Aldana, su hermana
María Fernanda Frausto Aldana y su prima Pamela Zepeda Aldana -todas empleadas
de Bienestar- también laboraron como edecanes hasta hace un par de años, cuando
era usual verlas en eventos de la Ciudad de León como SAPICA, incluso conservan
fotos de esta etapa de sus vidas en redes sociales.
Al
cuestionarle sobre el nivel de estudios, la experiencia y la preparación de
estas mujeres, dijo: “es imposible que una persona cause alta en la nómina del
gobierno si no cumple con el perfil previsto en el catálogo de puestos, el cual
es designado por la Función Pública: si permite el alta con prepa o secundaria,
lo permite y ya”.
Salarios
de $15,592.00 en la austera Delegación de Bienestar, con estudios de secundaria
permitidos por la administración federal y sustentados por la Función Pública.
Habría
que cuestionar el hecho de que una enfermera de una dependencia federal como el
IMSS, con estudios esté ganando entre 6 mil y 10 mil pesos mensuales durante
esta pandemia; que un profesor de la SEP -de tiempo completo- muchas veces con
estudios de posgrado este ganando 10 mil pesos. O bien, que un pasante jurídico
tras finalizar sus estudios universitarios tenga que iniciar como meritorio y
limpiar baños en el Poder Judicial a fin de obtener una oportunidad para poder
aspirar a una plaza.
Prácticamente
en todas las dependencias opera la figura Servicio Civil de Carrera, salvo en
la Delegación de Bienestar.
El
Delegado de programas sociales de la entidad mencionó además que las áreas
neurálgicas se componen por directores regionales, coordinadores y
subcoordinadores, que ninguna de las mujeres señaladas en la nota ejercen funciones
de ese tipo.
No
obstante la nota refiere funciones organizativas; con respecto a lo anterior
-según la información verificada
actualmente a través de Declaranet-,
encontramos que Mónica Frausto Aldana se desempeña actualmente como
Coordinadora Administrativa del Programa de Discapacidad, percibiendo un sueldo
de casi 30 mil pesos mensuales, cargo que abandonó Patricia Vilches Domínguez quien pasó de ser
la Coordinadora de Discapacidad, a ser la titular de Telecomm, ejerciendo
funciones de dirección, el cambio también le procuró un incremento a su
salario; ambas cuentan con estudios de licenciatura.
Por
otro lado Pamela Zepeda Aldana se desempeña como Subcoordinadora de seguimiento
operativo de discapacidad, mientras que
Guadalupe Horta como Coordinadora Interinstitucional de discapacidad , las dos
tienen estudios de nivel secundaria, realizando funciones organizativas y
percibiendo un sueldo de $15,592.00 cada una.
El
Superdelegado del Presidente López Obrador miente y traiciona a su líder.
Al
respecto de las siete mujeres que actualmente laboran en la dependencia y que pertenecen a la familia de la
Coordinadora Mónica Frausto Aldana, encontramos
en Declaranet con información actualizada a mayo de 2021, que tal y como
mencionó Hernández Núñez las empleadas
“no fueron contratadas de manera simultánea”, si no que en el año de 2020, 5 fueron contratadas en Mayo de 2020 (una
renunció a la delegación a inicios de año), 2 en Junio de 2020, y una en Julio
de 2020. Por lo que, no fue en transcurso del mismo mes, si no en el transcurso
de tres.
SUPERDELEGADO
IGNORA CONCEPTO DE NEPOTISMO
Según
Hernández Núñez “no aplica la figura del nepotismo debido a que la primera
línea de mando debe estar emparejada en parentesco con la persona que acata
órdenes”, no obstante, este podría acreditarse en el caso de Mónica Frausto
Aldana, coordinadora del programa de discapacidad quien es jefa directa de su
hermana María Fernanda Frausto con quien se mudó de oficina al ser ascendida de
puesto a inicios del presente año.
Es
importante mencionar que por este caso hay una denuncia ante la función pública
que fue radicada y remitida al órgano interno de control de la secretaria de
bienestar, con número de folio 9506/2021 que fue remitida al Organismo de
Control Interno de la Secretaría de Bienestar y se encuentra en trámite.
Sobre
el resto de las personas que comparten apellidos refirió simplemente que no
eran familiares “¡imagínate, que todos los Hernández fuéramos parientes!”
exclamó.
Si
bien, no todas las personas que comparten un apellido son parientes, resulta
extraño que en varias personas de la delegación ambos apellidos coincidan de
manera exacta.
Tal
es el caso de 13 -presuntas- familias, que tras la verificación realizada en
Declaranet encontramos que solo dos personas de apellido Cuellar Velázquez ya
no laboran para la dependencia, otro dato que contrastar con la manifestación
en la réplica del Superdelegado de que
“varias de las personas que son mencionadas en la nota ya no laboran
allí”
Sobre
las contrataciones el Delegado de Bienestar en la entidad refiere que son “no
jerárquicas”, que dependen del Jefe Inmediato, del área de Recursos Humanos, de
los Directores regionales -y lógicamente de él-; sin embargo, mediante una
solicitud al IINAI pudimos obtener un contrato en donde se manifiesta como “responsable” de las contrataciones al
ejecutivo federal a través de la Delegación de Bienestar, representada por El
Delegado de programas sociales, en este caso Mauricio Hernández Núñez a quien
en el contrato se le denomina “la dependencia”, siendo de tal modo el
superdelegado el responsable para los efectos legales y jurídicos.
Acerca
del salario superior al del mismo presidente no mencionó nada, ni tampoco
explicó por qué percibe $121,000.00 mil pesos ($103, 000.00 más $18,000.00) mensualmente.
Por
último Funcionario Público Federal emanado de la 4T condenó cualquier acto de
misoginia exigiendo respeto a modelos y edecanes, ya que son gente que cumple
con su trabajo de manera honrada.
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