Yolanda de la Torre, será "la Faraón" del Tribunal Superior de Justicia violentando la ley con la complacencia del Congreso sumiso

 

El pleno del Consejo de la Judicatura acaba de violentar la ley, el Artículo 110 al ratificar a la tristemente célebre priista Yolanda de la Torre como Magistrado-Presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado de Durango, la legisladora federal recientemente solicito licencia en el encargo que venía desempeñando esto da como resultado la sustitución de Ramón Guzmán Benavente ahora sí viene lo peor en la aplicación de la ley,  la justicia seguirá ciega, diabética, hipertensa, diabólica.

Recordemos que los MAGISTRADOS juramentaron sobre la Constitución Federal y Constitución Estatal donde esta última prohíbe que Yolanda de la Torre sea Magistrada Presidente veremos el valor del JURAMENTO DE MAGISTRADOS ante la LEY en el Congreso de Durango

Si estos Magistrados es lo mejor del gremio de Abogados, la verdad es que la JUSTICIA no tiene gran futuro en Durango en complicidad de un Congreso de Durango “agachón”, sumiso a las cuotas y cuates

Luego para poder ser designado magistrado de circuito se requiere ser ciudadano mexicano por nacimiento, que no se adquiera otra nacionalidad, estar en pleno goce y ejercicio de sus derechos civiles y políticos, mayor de treinta y cinco años, gozar de buena reputación, aquí es donde Yolanda de la torre la reputación anda por los suelos, nunca ha litigado, su andar por la política tiene serios cuestionamientos, no haber sido condenado por delito intencional con agravantes

¿Qué se necesita para ser magistrado en México?

Ser licenciado o doctor en Derecho, Yolanda de la Torre el título profesional que ostenta se puede debatir de cómo lo obtuvo, si realmente conoce la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, el Derecho Romano como mínimo.

 Haber ejercido durante, por lo menos, 12 años la profesión de abogado, cosa que esta toxica política jamás lo ha hecho, un argumento sólido para revertir con un conocedor n la materia, también nunca ha desempeñado, por igual tiempo, las funciones de Juez de una Corte de Apelación, Juez de Primera Instancia o Juez del Tribunal, o representante del Ministerio Público ante dichos tribunales.

Otro yerro más en un sexenio ya raspado, aruñado, marcado y señalado como 100% calderista