47 días y solo un "charal detenido", de los 48 "con indagatoria" el pronóstico es que ni amparo traen en sobaco, pareja virreinal de vacaciones felices y despistados

 

Lo que sucede en Durango quizá sea lo más insólito en el fabuloso mundo de la farándula política, quizás esto porque hay indolencia, indiferencia, pachorra del mandamás que gobierna el estado de Durango.

En estos días los Aispuro-Barrantes para no variar con el tema de ¿Dónde andan?, bueno pues estas parejas virreinales siguen libres, despistados, sin preocupaciones financieras, se les ve felices disfrutando las ganancias, el porcentaje de las comisiones de “moches”, ganancias que se lograron en el sexenio del cambio, gastando el préstamo de “los prestamos autorizados” legalmente por el Congreso del Estado.

A Don Rosas Aispuro Torres, a Doña Elvira Barrantes se les ha visto en Monterrey, la Cd de México, Culiacán, Los Ángeles, disfrutando, en esos lugares, siguen gastando “sus millones”  de pesos, no llevan centavos porque ya lo reitero una  y otra vez Don
Rosas “nunca se robó un centavo y puede ver de frente a los ciudadanos”, mientras los Fiscales ya tiene en su escritorio 48 carpetas con indagatorias, todo apunta que en esas investigaciones no están en la lista la pareja  virreinal de la Nueva Vizcaya.

Peor aún van 48 días de este “nuevo” gobierno y solo han “pescado un charal”, pero de los peces gordos como Elvira, Rosas, “El Totoy”, más el resto de los 48 ladrones que investigan ni sus luces, es más es fácil predecir que ni “amparo” traen en el sobaco.

Por lo pronto el mandatario Esteban Villegas pareciera que se le “hace bolas el engrudo” con la “reingeniería financiera”, el primer yerro, le siguió otro, ahora ya no encuentra si darle preferencia a el replaqueo a inventar otra “reingeniería”, el resultado se refleja en una masacre política que se le viene encima, el ciudadano no tiene por qué pagar el desfalco dejado por Elvira Barrantes con la anuencia del mandil Rosas Aispuro, este sujeto quiere sacar el dinero saqueado del bolsillo de los Duranguenses. ¡No al anticonstitucional replaqueo!