Se rumora mucho en los pasillos del IMSS en la Clínica Nº 1
“Ignacio Téllez” del municipio de Durango, sobre todo en el área de terapia
intensiva, qué el magistrado Héctor Manuel Silva Delfín jamás ha abandonado
dicha área destinada a pacientes COVID-19 “recomendados” área única y exclusiva
donde se permite hasta qué ingrese personal ajeno a la institución a trabajar
ya sea como cuidadores de pacientes o hasta como personal de enfermería.
Todo esto viene a colación por aquellos dichos de
trabajadores, personal de limpieza, médicos y de enfermería qué aseguran haber
visto al magistrado Silva Delfín en uno de los cubículos de dicha área de
terapia intensiva reservada para los poderosos o influyentes desafortunados qué
enfermaron del virus qué tiene en jaque al mundo hoy por hoy.
Se dice también en los
pasillos de la Clínica Nº 1 del IMSS qué dicho cubículo está protegido por una
cortina qué jamás se abre como la de los demás pacientes y qué todos los qué
entran o salen de ahí lo hacen con extraña secrecía; a decir de algunos, qué
han tenido un contacto más cercano con la Dra. afectada, los cargos por los qué
fue imputada la ya tan mencionada Dra. Calvillo, por los cuales también fueron retirados por el
gobernador José Rosas Aispuro Torres, en una especie de negociación o trueque,
aquellos teóricos del la conspiración qué sinceramente no andan tan errados ni
tan conspiranoicos.
Se dice qué hubo un
intercambio entre la Dra. Calvillo y el ejecutivo estatal para exonerar,
deslindar de culpas tanto a las corruptas traficadoras de influencias y quién
sabe qué más Dra. Velia Patricia Delfín y a la representante de la Fiscalía General
del Estado la temible, temida y enemiga
de la verdad y la justicia la tan ya aborrecida por los ciudadanos (médicos, abogados,
enfermeras, dueños de gimnasios bla,
bla.) Duranguenses Ruth Medina Alemán, esto para “dejar limpia” la imagen de
estas, ahora lo qué está en boga o voga (según la acepción que se le dé a la
palabra, francesa o inglesa) de los trabajadores del IMSS.-
Es qué entre las
indagatorias qué al parecer no desaparecieron del todo se anda buscando culpar
al equipo de enfermería qué estuvo en ese preciso momento del enmarañado asunto
del presunto intento de homicidio en contra del magistrado qué no debería estar
ocupando una cama de terapia intensiva en el IMSS, qué debería estar en el
ISSSTE.
En fin, toda esa sarta
de situaciones mal olientes qué ya sabemos y qué no nos han llevado a pensar en
otra cosa más qué en el revanchismo por el berrinche de la Dra. Velia Patricia Delfín
en contra de la Dra. Azucena Guadalupe Calvillo Carrillo (por no aceptar esta
última hacer modificaciones en el manejo y el tratamiento del poderoso hermano
magistrado) berrinches y castigos en contra de la prole y al qué está
acostumbrado Durango y al tan arraigado tráfico de influencias del qué nadie
“supuestamente” sabe ni escucha nada aquí en este muy callado y no tan
tranquilo pueblo colonial.
Bien pues ahora ya
saben algo qué más qué rumor es algo verídico y qué no suena nada descabellado,
por último se dice qué el delegado del IMSS en Durango Julio Gutiérrez Mandes está
tras estas sendas acusaciones a su personal a cargo (sinceramente nada de qué
extrañarse) y qué en los próximos días traerá a un sin fin más de involucrados
más en este terrible caso de tráfico de influencias, corrupción, qué
desafortunadamente nos lleva a pensar en la idea de cuántas personas libres de
culpa estarán encerradas en algún penal de la localidad siendo inocentes, solo
por qué la Lic. Ruth Medina Alemán se presta a hacer desaparecer o encarcelar a
quienes osan “atentar” en contra de alguno de sus cuates o de aquellos qué se
interpongan en el ya consabido negocio entre el narcotráfico, secuestro y
alguno qué otro negocio corrupto y mal oliente con el ejecutivo estatal.
Es de esperarse qué todo esto le pase factura al PAN en las
próximas elecciones del 2021 y también en las próximas elecciones en Durango
para Gobernador del estado, ya no hay credibilidad en dicho instituto político,
aquella ilusión de qué Durango podría erigirse como un bastión panista con este
enredo y con todas las situaciones de corrupción en las qué se ha visto
envuelto el Dr. José Rosas Aispuro y su esposa Elvira Barrantes (sin faltar la
temible “asesora” Verónica Terrones), le
den la estocada a este instituto político en las próximas elecciones y me
atrevo a decir qué en las venideras por muchos años más.
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