Los Servidores de la Nación deben
aclarar el destino de más de 3 mil millones de pesos ejercidos en 2019, pues
dichos recursos se extraviaron en una maraña de inconsistencias, omisiones e
irregularidades detectadas por la Auditoría Superior de la Federación
Servidores de la Nación, un desastre
administrativo de 3 mil millones
Servidores
de la Nación. Foto: Juan Carlos Villegas Robles / criteriohidalgo.com
REVISTA
PROCESO
Por Arturo Rodríguez García
Los
Servidores de la Nación –la estructura operativa en la que descansa el reparto
de las ayudas sociales del gobierno de López Obrador– deben aclarar el destino
de más de 3 mil millones de pesos ejercidos en 2019, pues dichos recursos se
extraviaron en una maraña de inconsistencias, omisiones e irregularidades
detectadas por la Auditoría Superior de la Federación en la contratación de
este personal y en el pago de sus salarios.
CIUDAD
DE MÉXICO (Proceso).– La política de
ayudas sociales, prioridad del presidente Andrés Manuel López Obrador, registra
errores, inconsistencias y un desorden administrativo que evita tener la
certeza sobre el destino de los recursos públicos.
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Por
lo pronto, su estructura operativa, los famosos Servidores de la Nación, debe
aclarar el ejercicio en 2019 de más de 3 mil millones de pesos.
Hasta
ahora, una auditoría dejó en evidencia el desastre técnico y financiero en el
desarrollo de sistemas para integrar el Padrón Único de Bienestar (PUB), un
instrumento que explícitamente la ley mandata para dar certeza al destino de
los recursos y que fue asignado a Infotec, empresa paraestatal que ya quebró
sin cumplir con el diseño y la operación de la base de datos.
Aun
peor, Infotec tuvo a su cargo la habilitación del “core bancario” (el cerebro
de un banco), así como una aplicación para la operación de las Tarjetas del
Bienestar. Pero ni uno ni otro: Banco del Bienestar y tarjetas no están
funcionado.
El
PUB se supone que está basado en el Censo del Bienestar, una tarea asignada a
los Servidores de la Nación que levantaron listas desde el periodo de
transición, sin marco legal para hacerlo, cuya evaluación está por emitirse.
Y
es que, para cerrar el círculo de irregularidad, la Auditoría Superior de la
Federación (ASF) emitirá el próximo sábado 20 su informe complementario de
auditoría a la administración pública federal por el ejercicio fiscal de 2019,
que incluye la revisión realizada a la “Contratación de personal mediante el
esquema Servidores de la Nación”, donde observa el mencionado monto por aclarar
de más de 3 mil millones.
En
uno de los dos pliegos de observaciones, el monto irregular identificado es de
2 mil 965 millones 802 mil 71 pesos, correspondientes a la nómina de los
Servidores de la Nación. Un segundo pliego de observaciones, es por 74 millones
781 mil 891 pesos y también se relaciona con nóminas.
En
total, la auditoría 240-DS, practicada a la Secretaría de Bienestar (Sebien),
establece un monto por comprobar por el orden de 3 mil 40 millones 583 mil 962
pesos; esto es, casi el total del presupuesto ejercido mediante el esquema de
Servidores de la Nación, cuyo rastreo ha sido difícil de desagregar en trabajos
periodísticos e investigaciones independientes por lo que toca a 2019.
Si
bien la Secretaría de la Función Pública (SFP) incluyó un apartado en su portal
Nómina Transparente para los Servidores de la Nación, ahí sólo puede
consultarse el nombre y monto devengado por más de 17 mil personas que perciben
8 mil 173 pesos mensuales netos.
Sin
embargo, en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2019 la figura no existe
y fue con cargo al Capítulo 1000 del clasificador de gasto, apartado que
corresponde a servicios personales. En 2020 ese personal –por honorarios y sin
prestaciones básicas– costó al erario 3 mil 233 millones de pesos.
Fragmento
del reportaje publicado en la edición 2311 de la revista Proceso, cuya edición
digital puede adquirir en este enlace.
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