Pues si las y los pseudo "Servidores de la Nación"
haciendo de las suyas todo este tiempo con la aplicación de las vacunas.
Así empieza esta historia negra, pues sucede que deciden a
quien vacunan y a quien no, tienen mucha más preparación que un Doctor
especialista ya que con toda la prepotencia humillan al personal médico para
que ni se atrevan a contradecir sus órdenes (aunque la mayoría no tiene ni una
licenciatura terminada).
Los testigos mencionan
que se jactan de sus groserías al Dr. Ontiveros, quien no ha hecho otra cosa
que estar al pendiente apoyando con la logística de la vacunación.
Entre las arbitrariedades de estas personas comandadas por
"la del chalequito negro" de nombre Gisela o Griselda porque no se
quiso identificar cuando se le pregunto, están la de solicitar jóvenes de las
diferentes escuelas donde se estudia la salud para que les hagan el trabajo a
los pobres y cansados flojos de bienestar que se la pasan de paseo por toda la
FENADU con en el celular, prometiéndoles los brigadistas una vacuna que nunca les
aplican, diciéndoles que es su obligación ayudar con esta encomienda federal.
Otra situación por demás
indignante es la acapararían de las vacunas para aplicarlas a sus familiares,
amigos y conocidos, lo cual es un delito.
Ya ni que mencionar de la gente que regresan sin vacunar por órdenes
de "la del chalequito negro" argumentando requisitos para vacunarse
risorios e intrascendentes.
¿Qué deberás no hay nadie que ponga orden en la FENADU con
estas personas? ¿Hasta cuándo será reconocida la labor de los profesionales de
la salud en nuestro estado?
Para que solicitar
brigadistas con la promesa del pago de una vacuna que no se les aplica, que no
es mejor hacer su trabajo y ser deberás los "Servidores de la Nación".
Dese una vueltecita por la FENADU C. Gobernador Don Rosas
Aispuro Torres, pero no solo para la foto, entérese bien de lo que pasa con las
vacunas y su aplicación.
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