Efectivamente ha surgido una nueva clase de
"morenistas" conformada por diputados y ex diputados, presidentes
municipales, regidores y funcionarios públicos de MORENA que otrora
pertenecieron al PRI.
Este grupo se ha
enriquecido acumulando grandes y pequeñas fortunas bajo las siglas de MORENA,
conformando un Club de amigos, una élite que en el tránsito de la política
viaja en primera clase, pero todavía hay verdaderos morenistas que tienen la
ilusión de "rescatar al partido" que tienen la esperanza de que
"la élite morenista de primera clase" mediante el proceso electoral
"le gane al PRI" y asuma la gubernatura para poner en práctica los
principios de la 4T
Esto sin advertir que esta élite corrupta nada, nada, de nada
ha hecho desde los cargos públicos que han usurpado; otros morenistas, muchos
morenistas se han retirado de Movimiento de Regeneración Nacional, sabedores
que el agua y el aceite no se podrán mezclar, otros simplemente han sido
marginados, separados, apartados y discriminados, otros reducimos la militancia
a pequeñas reuniones de café o en estos grupos de watts app.
La realidad por
dolorosa o humillante que parezca nos envuelve en un callejón sin salida, los
fundadores y militantes de MORENA, ahí están como una figura del pasado
reciente, sin voz ni voto, en el rincón donde nos han colocado los Priistas, de
la víspera la "élite morenista de primera clase".
La historia se repite, había afirmado C. Marx, "La primera vez como tragedia la segunda como farsa" y es lo que estamos viendo pero si la caída del PRD, fue paulatina y gradualmente, la caída de MORENA, será estrepitosa porque sólo depende de un hilo y ese hilo es nuestro presidente López Obrador, y aún así no las tienen todas consigo, a tres meses de la elección se verán los resultados, no hay que ser mago o politólogo para vislumbrar la derrota que será la consecuencia del oportunismo, la desviación hacia la derecha y la corrupcion.
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