Francisco Javier Pérez Meza y Lauro Arce, personas no muy gratas en el IMAC

 


Los creadores y el arte duranguense son brillo fulgurante de nuestra tierra hasta antes de septiembre del 2022, fecha en que inició el nefasto gobierno de Esteban Villegas, los duranguenses de todas las edades, participaban en concursos, torneos, festivales y todo tipo de certámenes, no para obtener premios, sino para satisfacer esa vena del arte y la cultura que llevamos las y los duranguenses desde generaciones anteriores. Hasta antes de septiembre del 2022, los artistas y el arte duranguense eran brillo fulgurante de nuestra tierra, reflejo de los rasgos de un pueblo que aspira a ser próspero porque es muy trabajador.

 A pesar del casi inexistente y mediocre trabajo cultural llega al máximo puesto del gremio cultural un total desconocido llamado


Francisco Javier Pérez Meza, que entre sus flamantes méritos es haber sido subdirector del IMAC con un tipo no menos deleznable llamado Lauro Arce.

 Uno de los tantos ejemplos del desdén de estos expertos facturaros que roban a sus anchas en los festivales del mariachi de la mano la mentada Paz Padrón, ha sido despedir a diestra y siniestra sin tomar en cuenta las trayectorias ni los perfiles, su único propósito es hacer espacio en la nómina para incrementar sus sueldos y meter a sus compinches

Pero el hambriento Pérez Meza no es el único culpable, su segundo al mando José Argüelles Campos llegó mareado por el ladrillo al que se subió (que se puede esperar tipos hambreados y jodidos que toda su miserable vida han sido parásitos, el principal es quien le dio el cargo, un gobernador que presume de  defender Durango, que en

su vida ha escrito un libro o realizado una investigación que valga la pena leer, que carece de mediana cultura general y cuando habla tartamudea y se pone nervioso, pero sí en cambio, se sabe de memoria las canciones del Julion Álvarez y Los Tucanes de Tijuana. Este señor será culpable que en materia cultural y artística el tiempo se detenga en Durango por seis años, nos esperan corrupción, desfalcos, opacidad, desvió de recursos y nepotismo, a cambio de aburridos e inservibles canciones que Lauro Arce iba a recitar con gastos pagados junto con sus incondicionales, que, por cierto, serán los nuevos aviadores... y luego se preguntan porque estamos quebrados.

Somos por naturaleza, una tierra de artistas que plasman su creación a través de la identidad de los municipios y comunidades que conforman nuestra entidad por medio de lienzos, palabras escritas, trazos, notas musicales, aromas, sabores e hilos que forman redes y hacen de nuestro territorio un espacio de artistas de incesante creación. Vienen tiempos mucho peores, la pesadilla apenas comienza.

 

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