El aumento al carísimo
transporte $1 no puede ser menor por manejo de moneda, pero debe ser acompañado
de mejora de unidades y capacitación a conductores, recordarles que, gracias al
usuario, llevan el sustento al hogar, pero sobre todo haciendo más ricos a
líderes sindicales y a los tóxicos nefastos concesionarios.
El PAN Durango debe
reconstruirse con José Antonio Ochoa Rodríguez, el alcalde de la capital del
Estado, además de limpiar al "Aispurismo" que ni panista fue el
Alterno del PRI
Si en el inicio de este cálido lunes se dio el exagerado
aumento por una cortesía del inútil e
inexistente Consejo Consultivo, vía la Sub Secretaria de Movilidad y
Transportes al transporte público, esto sería de $1.00' peso por las chatarras
que circulan por las tradicionales, calladas y tranquilas calles de Durango,
sin duda alguna es mucho el aumento, incluso la mayoría expresan que es muy
alto.
Pero la verdad las
cosas es que no podía hacer otra manera porque es la moneda fraccionaria de más
baja denominación que manejamos, no es malo, es exagerado el aumento, pero esto
de que siempre y cuando se empiece a generar el cambio de unidades para
aumentar la calidad del servicio, es un tema que se dice año con año y siempre
es lo mismo, sumado a las caras de mentada de madre de los choferes, quienes
suben y bajan al usuario donde se les antoja, sumado a la "música
ambiental" de infamia.
Algo muy importante
que les está olvidando a los concesionarios es la capacitación a sus
conductores, algo que ya se lleva a cabo en otras entidades, en Durango por
ahora ya no se llevaba a cabo, en la administración pasada ni en la actual, si
mal no recuerdo que con Jorge Herrera se
capacitó a los concesionarios del transporte público, pero esto no basta, nada más unidades nuevas, tenemos
que enseñarlos a manejar a los choferes, educarlos, hacerles saber que la
cortesía es gratuita, tenemos que educarlos para la nueva forma de convivencia
social, que sea armónica.
En otro tenor llega la
nueva directiva al Partido Acción Nacional, una nueva directiva con una
encomienda, no como personalidad sino como filosofía, tienen que lavarse la
cara de esa corrupción, tienen un personaje central llamado José Antonio Ochoa,
alcalde de Durango, él debe ser el símbolo de ese partido en estos momentos,
deshacerse del pasado de la sociedad de toda la corrupción que les heredó de la
mano de muchos empiristas de la vieja guardia que fueron los que le causaron
gran daño público.
No se trata de
satanizar un partido, simplemente debemos de ver de qué tamaño es el daño,
quiénes fueron los que lo causaron, por qué porque la sociedad, el proceso
electoral necesita de un partido diferente.
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